El blackjack no es solo un juego de suerte, también tiene su ciencia. Y esa ciencia empieza por algo básico: saber qué manos te convienen, cuáles evitar y cómo jugar según lo que te toca. No todas las combinaciones de cartas tienen la misma pinta, y aunque a veces un 16 te parezca inofensivo, puede ser una trampa disfrazada. En este artículo vamos a repasar las mejores manos que puedes tener, las peores que querrás evitar, las iniciales, y qué hacer cuando te cae una mano suave o dura (sí, esos términos también tienen su miga) y mucho más
Las mejores manos de blackjack
Aquí no hay sorpresas: la mejor mano posible en el blackjack es el famoso blackjack natural. Es decir, cuando tus dos primeras cartas suman 21. Normalmente eso significa que tienes un As y un 10, o un As con una figura (J, Q o K). Esta mano es insuperable y, si el crupier no saca lo mismo, te llevas el premio con un pago de 3 a 2. No hay nada mejor que empezar una partida así.
Pero ojo, no todo termina con el blackjack natural. Hay otras manos que, sin ser tan brutales, te dan una ventaja clara si sabes jugarlas bien:
- 20 (dos figuras o 10s): Esta es una joya. No se dobla, no se divide, no se toca. Plantarse es lo correcto el 100% de las veces, salvo que quieras ver arder tu saldo.
- 11 (por ejemplo, 5 + 6): Mano ideal para doblar si el crupier tiene una carta débil (como un 4, 5 o 6). Te da muchas opciones de sacar un 10 y alcanzar 21.
- 10 (por ejemplo, 6 + 4): Otra candidata perfecta para doblar, especialmente si el crupier no parece muy fuerte.
- As + 9 (20 suave): Prácticamente lo mismo que un 20 fuerte. En este caso también lo mejor es quedarse quieto y no tentar a la suerte.
- Par de 8s: Aunque no parezca gran cosa, dividirlos te da más oportunidades de mejorar. Dos ochos juntos hacen 16, una de las manos más complicadas del juego. Separarlos te da dos oportunidades de empezar desde cero.
Una buena mano en blackjack no siempre es un 21. A veces es una jugada inteligente con un 10 o un 11 bien doblado. Y como verás más adelante, saber cuándo exprimir cada mano es lo que separa a los que “solo echan una mano” de los que van en serio.
Las peores manos de blackjack
No todo en el blackjack es alegría y 21s perfectos. Hay manos que simplemente te hacen sudar frío nada más verlas. Son esas combinaciones que sabes que, hagas lo que hagas, puede que termines viendo cómo se esfuman tus fichas. Estas son algunas de las peores manos que puedes recibir:
- 16 (sin As): El temido 16 duro (por ejemplo, 10 + 6 o 9 + 7). No hay una decisión buena aquí: si te plantas, el crupier puede ganarte fácilmente; si pides carta, hay muchas opciones de pasarte. Es el clásico «estás entre la espada y la pared».
- 15 (sin As): Muy parecido al 16. Especialmente doloroso si el crupier muestra un 10 o una figura. Lo normal es pedir carta, pero da un miedo tremendo.
- 12 (sin As): Puede parecer que no está tan mal… pero si el crupier tiene un 2 o un 3, te la juega: tienes que decidir entre arriesgarte a pasarte o plantarte con una mano muy débil.
- Par de 5s: Aunque suene mejor que un 10, en realidad un par de 5s no deberías dividirlo nunca. Mejor tratarlos como un 10 y doblar si se puede, pero si los separas, lo más probable es que te metas en un lío.
- Par de 4s: Dividir 4s tampoco es muy buena idea. Suelen dejarte en manos flojísimas (8s), que no son gran cosa contra un crupier que tenga cartas fuertes.
Hay manos que, simplemente, hay que saber sufrir. El truco está en no empeorarlas tomando decisiones equivocadas. ¡Y recuerda! A veces perder poco también es ganar algo en este juego de locos.
¿Te ha tocado alguna vez ese maldito 16 contra un 10 del crupier? No te preocupes, nos ha pasado a todos… y seguro que nos seguirá pasando.
Mejores manos iniciales
Vale, acabamos de hablar de manos que nos quitan el sueño… así que ahora toca el otro lado de la moneda: esas manos iniciales que te hacen sonreír nada más verlas. Son las que, con un poco de cabeza (y algo de suerte), suelen terminar en fichas para ti.
Aquí van las más top:
- 21 (As + 10 o figura): Nada que explicar aquí. Es el famoso blackjack natural. Si no estás en una mesa con crupier tramposillo, esta mano suele darte una victoria inmediata y pagada con un sabroso 3:2. Es la gloria del juego.
- 20 (10 + 10 o figura + figura): Muy sólida. Solo hay una mano que te puede ganar directamente: otro 21. Así que lo normal es plantarte y esperar que el crupier no se saque un conejo de la chistera. Dividir 10s, por cierto, es un sacrilegio (aunque algunos lo hagan… por valientes o por locos).
- 19 (9 + figura / 10 + 9 / As + 8): Otra mano de mucho respeto. No es invencible, pero si el crupier tiene una carta baja, las probabilidades están contigo. Normalmente lo mejor es quedarse quieto y no tentar a la suerte.
- 18 suave (As + 7): Aquí empiezan los debates. Si el crupier tiene una carta floja, te plantas. Si tiene una fuerte (como un 9 o un 10), puede ser buena idea pedir carta o incluso doblar en algunos casos. Es una mano versátil, de esas que te hacen pensar.
- 11 (5 + 6 / 4 + 7): Esta es la joya de los que saben jugar. No es una gran mano por sí sola, pero es perfecta para doblar. Tienes muchas posibilidades de sacar un 10 y plantarte con un sólido 21. Muy jugosa contra un crupier débil.
- 10 (6 + 4 / 5 + 5): Igual que el 11, pero con un poco más de riesgo. Doblar aquí también es una buena jugada si el crupier no tiene una carta muy alta. Es de esas manos que pueden cambiar una partida si sabes cuándo atacar.
Cuando te tocan estas manos, no hay que volverse loco, pero sí hay que saber aprovecharlas. Porque en el blackjack, ganar empieza por no estropear una buena mano.
¿Cómo jugar al blackjack con manos suaves?
Primero lo primero: una mano suave es aquella que tiene un As que cuenta como 11. ¿Por qué es «suave»? Porque no te puedes pasar con una sola carta más. El As funciona como un comodín: si vas justo, vale 11; si te pasas, baja automáticamente a 1. Una maravilla. Además, también te enseñamos cómo jugar con ellas.
Ejemplos de manos suaves:
- As + 5 (total 16 suave)
- As + 7 (total 18 suave)
- As + 2 + 3 (total 16 suave)
Y ahora, lo importante: ¿qué hacemos con ellas? Aquí van las claves. La estrategia básica para manos suaves:
- As + 2 a As + 6 (13 a 17 suaves): Si el crupier tiene una carta baja (4, 5 o 6), ¡dobla si puedes! Si no puedes doblar, pide carta. El objetivo aquí es mejorar la mano sin mucho riesgo. Si el crupier tiene una carta alta (7 o más), pide siempre. Tu mano no es tan buena como parece.
- As + 7 (18 suave): Esta es la más compleja. Si el crupier tiene 2, 7 u 8, lo mejor es que te quedes como estás. Si tiene de 3 a 6, dobla si se puede, si no, quédate. Y, si tiene 9, 10 o As, pide carta. ¿Por qué tanto lío? Porque es una buena mano… pero no lo suficiente contra manos fuertes del crupier.
- As + 8 o As + 9 (19 o 20 suaves): Aquí no hay debate: te plantas y esperas a que el crupier no te gane o te iguale. No hay necesidad de jugártela.
Consejo rápido:
Las manos suaves son perfectas para doblar sin miedo. Aprovecha cuando el crupier está débil (cartas del 2 al 6) y sácale partido a esa ventaja de poder “fallar sin fallar”.
¿Cómo jugar al blackjack con manos duras?
Vale, ahora hablamos de las temidas manos duras y cómo jugar con ellas. Son esas en las que no hay ningún As que cuente como 11 o, si lo hay, ya está contando como 1 porque no puedes permitirte pasarte. No hay red de seguridad. Si te pasas, adiós muy buenas.
Ejemplos de manos duras:
- 10 + 7 = 17
- 9 + 6 + 2 = 17
- As (vale 1) + 10 + 6 = 17
¿Ves la diferencia? Aquí todo suma de forma rígida, y cada carta cuenta con todo su valor real. Esta es la estrategia que seguiríamos para las manos duras:
- 8 o menos: Siempre pide. No tienes nada que perder y todo por mejorar.
- 9: Dobla si el crupier tiene entre 3 y 6. Si no, pide.
- 10: Dobla si el crupier tiene entre 2 y 9. Si no, solo pide.
- 11: Esta es la mano perfecta para doblar, ¡siempre! A no ser que el crupier tenga un As, ahí puede que prefieras ir con más cuidado.
- 12: Esta es la trampa clásica. Si el crupier tiene entre 4 y 6, te plantas. Si tiene 2, 3 o de 7 para arriba, pide. Porque con 4-6 es fácil que él se pase, así que tú no arriesgas.
- 13 a 16: Si el crupier tiene 2 a 6, te plantas. Si tiene 7 o más, pide. Sí, son manos complicadas. Pero si el crupier va fuerte, tienes que buscar mejorar.
- 17 o más: Te plantas siempre. Aquí no se toca nada. A cruzar los dedos y confiar.
Consejo rápido:
En las manos duras se gana siendo paciente y frío. No te calientes queriendo sacar un 21 mágico cada vez. A veces lo mejor es no moverse y esperar a que el crupier reviente.
Manos duras y manos blandas
Antes de meternos en estrategias y jugadas maestras, hay que tener clara una cosa: no todas las manos de blackjack son iguales. Las hay duras y blandas, y saber distinguirlas puede marcar la diferencia entre ganar o irte con las manos vacías.
¿Qué es una mano blanda? Es una mano que incluye un As que vale 11. ¿La ventaja? Que si te pasas, el As puede cambiar automáticamente a valer 1 y salvarte el pellejo.
Ejemplo: As + 6 = 17 blando. Si pides un 10, se convierte en As (1) + 6 + 10 = 17 duro.
¿Y una mano dura? Es una mano donde no hay As o el As solo puede valer 1 sin que te pases. Aquí no hay margen de error, cada carta cuenta con todo su valor.
Ejemplo: 10 + 7 = 17 duro. Si pides y sale un 6, te vas al 23… y pierdes.
Debes tener en cuenta toda esta información, ya que solo así podrás armar una estrategia básica del blackjack.